Una colaboración icónica en clave gótica-pop
Lady Gaga estrenó el 3 de septiembre su nuevo video musical “The Dead Dance”, marcando su primera colaboración artística con el legendario director Tim Burton. El videoclip, lanzado justo antes de su performance en los MTV VMAs 2025, fusiona el pop contemporáneo con un universo visual inquietante y elegante.
Rodado en la Isla de las Muñecas de México, “The Dead Dance” juega con la dualidad del blanco y negro intenso y destellos de color, mientras Gaga encarna a una figura espectral rodeada de muñecas, metáfora de la devastación emocional tras una ruptura amorosa.
La palabra clave “Lady Gaga The Dead Dance” ya se posiciona entre las más buscadas en plataformas como YouTube y X.
Estética Burton, coreografía de Goebel y un equipo de lujo
Tim Burton dirigió esta producción junto a Natalie Testa, con diseño de vestuario a cargo de Colleen Atwood. La coreografía fue concebida por Parris Goebel (reconocida por su trabajo con Rihanna y J.Lo) y Corey Panadero. Gaga produjo el video junto a Michael Polansky, su pareja y colaborador habitual.
Todo el universo visual recuerda a películas como Beetlejuice y Corpse Bride, pero con un giro moderno: una diva del pop enfrentando el luto emocional con fuerza escénica y estética abrumadora.
Una canción sobre el dolor, la transformación y la fiesta
Producida por Andrew Watt y Cirkut, “The Dead Dance” fue descrita por Gaga como una “canción sobre el final del amor y el comienzo de una nueva libertad”. Con líneas de bajo contagiosas, sintetizadores que evocan a Thriller y una vibra funk-pop ochentera, el tema equilibra oscuridad emocional con ritmo bailable.
Según Billboard, es “una vibrante pieza de electro pop impulsada por teclados funhouse”. Rolling Stone la definió como un “éxito funky-pop de atmósfera fantasmagórica” y NME celebró su “ritmo contagioso y energía gótica”.
Sincronía total: video, cameo y nuevo tour global
El videoclip se lanzó en simultáneo con el estreno del cameo de Gaga en la serie Wednesday (temporada 2) de Netflix, donde interpreta a la misteriosa Rosaline Rotwood. Esta sincronía narrativa forma parte del universo expandido que Gaga ha construido con MAYHEM, su aclamado octavo álbum de estudio.
Además, la artista se encuentra en medio de su gira mundial The MAYHEM Ball, con entradas agotadas y espectáculos en estadios de todo el mundo. El show combina temas de MAYHEM con clásicos como “Just Dance”, “Born This Way” y “Shallow”.
MAYHEM: un álbum que reescribe las reglas del pop
Con su séptimo número 1 consecutivo en el Billboard 200, “MAYHEM” no solo lideró las listas durante semanas, sino que también redefinió la estética y la narrativa del pop contemporáneo. El álbum ha sido certificado Platino por la RIAA, y su éxito global se consolidó con la colaboración junto a Bruno Mars, “Die With a Smile”, que batió récords en Spotify y el Hot 100.
Según el New York Times, el tour es una “extravagancia deliciosamente exagerada”. Rolling Stone subrayó la “madurez artística de Gaga”, y Variety lo llamó “un espectáculo afinado y deslumbrante que celebra todos sus talentos”.
Un universo gótico-pop hecho a medida
Entre el videoclip de “The Dead Dance”, su performance en los VMAs, su papel en Wednesday, y la gira MAYHEM Ball, Lady Gaga está expandiendo su mitología personal como nunca antes. Esta nueva era visual y sonora se siente como una reinvención total: melancólica, poderosa y profundamente teatral.
Deja una respuesta