Con el respaldo del Banco de Occidente y la presencia de BMW Honduras, The Golden celebró su galardón internacional con una velada sensorial que rindió tributo a la excelencia del café nacional.
Una noche para saborear el alma del café hondureño
El aroma envolvente del café y la promesa de una experiencia única convocaron a invitados especiales en una noche memorable: The Golden, reciente ganador del premio The Best Coffee of the World, demostró por qué el café hondureño tiene no solo cuerpo, sino alma.
El evento, presentado por Banco de Occidente, reunió a amantes del buen café, líderes del rubro y figuras del mundo gastronómico para celebrar un hito que pone a Honduras en el mapa de la excelencia cafetalera internacional.


Café, gastronomía y orgullo nacional
Durante la velada, los asistentes vivieron una ruta sensorial que integró lo mejor del café de especialidad con platillos icónicos de la gastronomía hondureña. Maridajes pensados al detalle, aromas intensos y texturas reconfortantes convirtieron cada sorbo en una historia contada desde la finca hasta la taza.
Cada estación fue diseñada para conectar con los sentidos y con el origen. Desde variedades cultivadas en las alturas de Marcala hasta expresiones tostadas con maestría, The Golden reveló la dedicación detrás de cada grano.

Banco de Occidente: motor del desarrollo cafetalero
Detrás de esta celebración, destacó el respaldo estratégico del Banco de Occidente, una entidad que históricamente ha apostado por el desarrollo del sector cafetalero hondureño. Su compromiso va más allá del patrocinio: representa una alianza con productores, emprendedores y marcas que llevan el nombre de Honduras al mundo.
A través de financiamiento, programas de apoyo y promoción de eventos como este, Banco de Occidente reafirma su rol como aliado clave del agro y la innovación nacional.
Un homenaje con sello de lujo
La velada contó también con la participación especial de BMW Honduras (Excel Automotriz), sumando elegancia y diseño al encuentro. La presencia de la marca aportó un guiño de lujo contemporáneo, complementando la narrativa de un café que no solo se exporta, sino que emociona.
















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